Las sesiones de psicoterapia son un espacio para reflexionar sobre las cuestiones que te preocupan en este momento o te generan malestar. Sólo afrontando los obstáculos aprendemos a analizarlos y superarlos.
Es muy importante que como paciente y terapeuta nos sintamos cómodos el uno con el otro para poder establecer una relación de confianza y un vínculo seguro. En las primeras sesiones determinamos los objetivos que van a guiar todo el trabajo posterior y trabajamos según este plan. Esto nos ayuda a no irnos por las ramas y estar seguros de que estamos trabajando lo que tú necesitas y no alargando la terapia innecesariamente.
En las sesiones no emito juicios (bien/mal, correcto/incorrecto) ni te daré consejos puntuales del tipo ¿L@ llamo o no l@ llamo?, sino que te acompañaré para que juntos evaluemos nuevas alternativas y posibilidades, siendo la terapia un espacio seguro para reflexión y para decidir la mejor vía posible, la tuya propia. Por eso te pido tu participación activa y mucha motivación y determinación.
Creo en la psicoterapia como un espacio abierto donde aprenderás a desarrollar recursos que te permitirán resolver tanto esta situación disfuncional concreta, como otras futuras que pudieran aparecer, porque ya has desarrollado y ampliado tus capacidades cognitivas, afectivas y sociales. Las habilidades que desarrolles en terapia, te servirán para siempre.