CON FRECUENCIA SIENTO QUE NO ENCAJO…
¿Te preguntas por qué eres tan distinta a otras personas? ¿A veces te sientes rara, muy diferente al resto? ¿Te encanta estar sola y valoras mucho el tiempo contigo misma? ¿Te sientes sola y crees que eres la única con este problema? A menudo te preguntas ¿Por qué no encajo? Permíteme confesarte que a mí también me ocurre a menudo y he querido hablar acerca de ello porque durante esta semana, he tenido varias sesiones en las que el tema principal ha sido la sensación de no encajar. Es importante reconocer que nadie está exento de experimentar dicha sensación.
En nuestra forma de vida actual, siempre orientada hacia afuera, constantemente inmersas en la acción, el trabajo y la vida ajetreada, nos desconectamos de nosotras mismas y de nuestras relaciones más importantes. Es natural “sentir que no encajo”, sentirnos solas, si nos hemos alejado de nosotras mismas como la primera persona a la que hemos descuidado.
Sin embargo, quiero que sepas que no estás sola en este proceso. Muchas mujeres han experimentado la sensación de “no encajo” en algún momento de sus vidas. Es crucial comprender que esta percepción no define quiénes somos como personas. La individualidad y la diversidad son aspectos intrínsecos de la experiencia humana.
¿Cómo reconectar con nosotras mismas?
Enfrentar este desafío requiere tomar medidas para reconectar con nosotras mismas. Aquí te comparto algunas estrategias que pueden ayudarte:
- Autoconocimiento.
Dedica tiempo para conocerte a ti misma. Reflexiona sobre tus valores, intereses y pasiones. Identifica tus fortalezas y debilidades. A veces pasamos tanto tiempo en el trabajo o al cuidado de otros, que nos olvidamos de quienes somos y qué nos gusta. Cuanto más te conozcas, más fácil será encontrar tu lugar en el mundo.
- Busca apoyo.
Comparte tus sentimientos con personas de confianza, ya sea amigos cercanos, familiares o un profesional de la salud mental. El apoyo emocional puede ser invaluable para superar la sensación de no encajar y encontrar un sentido de pertenencia. Si sientes que los amigos que tienes ahora mismo son muy diferentes a ti o que no compartes valores, es hora de abrirte a crear relaciones nuevas.
- Explora nuevos ambientes.
Empieza a buscar conexiones con personas que comparten tus gustos e intereses. Participa en actividades y grupos donde puedas conocer a otras mujeres con experiencias similares. El sentido de comunidad puede ayudarte a sentirte aceptada y comprendida. A veces hace falta salir a explorar qué hay ahí fuera, aunque cueste al principio. Una vez superada esa resistencia inicial ¡la recompensa puede llenarte con creces!.
- Aceptación y autocompasión.
Reconoce que todos somos únicos y que no hay una única forma “correcta” de ser. Aprende a aceptarte a ti misma tal como eres y practica la autocompasión. Permítete cometer errores y crecer a través de ellos. Es el mejor regalo que puedes darte. Recuerda que le llamamos cultivo de la compasión, porque es una tarea que hacemos a diario con meditaciones, participando en un grupo, en terapia, etc. Es camino y no punto de llegada.
Es importante recordar que sentirte como si no encajaras no es un defecto personal, sino una experiencia común en un mundo diverso y en constante cambio. No estás sola en esto, y hay pasos que puedes dar para encontrar tu lugar y vivir una vida auténtica y significativa.
Así mismo, si sientes que necesitas apoyo adicional, te animo a buscar la ayuda de un profesional de la psicología. En terapia trabajarás con tus creencias limitantes y sentimientos, a la vez que empiezas a tomar acción para sentirte más conectada contigo misma y con los demás.
Poder conectar con la sensación de comunidad es un pilar importante de una buena salud mental y una vida equilibrada. Espero que tengas la fuerza suficiente para empezar este camino de conexión contigo y con los demás.
Si te ha gustado este artículo, quizá te pueda interesar Aceptar como actitud